Veo un reloj de arena frente a mí que se va vaciando poco a poco …

Los granitos caen de afán, abriéndose paso en la cintura del reloj, caen y caen…

El corazón late más rápido pensando en todo lo que me queda por hacer antes de que se desocupe completamente.

Recuerdo que debo darle sentido a lo que pase mientras eso pasa.

Aprecio ahora más que antes.

Me esfuerzo ahora más que antes.

Amo ahora más que antes.

Quiero exprimir los minutos y aprovecharlos en lo correcto….más que antes

Se revela ante mí la realidad que , necios, los humanos nos tardamos a veces en entender.

No me pertenece más que este segundo y por tanto merece absolutamente toda mi atención, mi deleite y mi gratitud.

Cuando estamos parados al filo de algo que nos va a transformar para siempre la vida,  un torbellino de conciencia nos envuelve y nos revela lo que importa sin tregua, sin dudas y sin atenuantes.

Apreciar, apreciar, apreciar…

No se distraigan, no nos distraigamos… porque en un parpadeo ya no queda ni un granito de arena en la parte de arriba del reloj ⏳